Un space cat que promete generar moda entre los seguidores de la cantante.
La exitosa cantante estadounidense Miley Cyrus, además de escandalizar a los padres de sus seguidores (quién te ha visto y quién te ve, «Hannah Montana») también parecen gustarle los gatitos. Concretamente los gatitos tristes y llorones. Y si son gigantes y vuelan por el espacio… mejor.
El gato gigante de Miley Cyrus
La cantante actuó en la pasada gala de los American Music Awards 2013 con una presentación que no pasó desapercibida, ni entre los asistentes ni entre los medios e Internet posteriormente. Asómbró con la puesta en escena de su éxito melancólico «Wrecking Ball», en el que habla de una despedida sentimental. Miley lo cantó acompañada de un gatito naranja gigante, que volaba por el espacio entre estrellas y túneles de gusano. El gatito recitaba la canción sincronizando sus labios con los de la cantante. Al llegar a la estrofa «no pretendí iniciar una guerra, sólo quería que me dejaras entrar» el gatito gigante… arrancó a llorar.
Para completar la puesta en escena, Miley vistió un conjunto de bikini y zapatos llenos de caras de gato, creado por el diseñador Markus Lupfer para la ocasión, así como pulseras y pendientes «space style», muy acorde a la imagen desenfadada de sus actuaciones, y al gatito que cantó junto a ella.
De la pantalla al labio
Recientemente la artista, consciente de la repercusión de su actuación, o quizá por mero placer gatero, se ha tatuado la cara del gatito naranja lloroso en… ¡La parte interna de su labio! (Ouch!) Y lo ha mostrado orgullosa al mundo a través de Instagram.
Los tatutajes en el labio no son algo nuevo (¡Ni los tatuajes de gatitos!), pero seguro que ahora más de un progenitor en el mundo está temiendo que su hijo/a se sume a la moda generada con los gustos de la excéntrica cantante.
¿Qué te parece?
¿Qué te parece la puesta en escena de Miley Cirus con su gato gigante? Y el tatuaje oculto tras el labio, ¿Excentricidad u orgullo gatero?, ¿Tienes tú un tatuaje gatuno, visible u oculto? ;)
Me gusta la canción pero no su actuación. No me gusta que usen a los gatitos como objetos retocables a los que moverles la boca por ordenador y ponerles carita triste con lágrimas. Son kawaii por naturaleza, no necesitan de tonterías.
El tatuaje me mata… Qué dolor… Y vaya sitio, queda muy feo… Yo denunciaría al tatuador xDDDD